Con 64.660 hectáreas, que abarcan tres comunidades autónomas; Asturias, Cantabria y Castilla-León, los Picos de Europa forman el espacio protegido de mayor extensión de toda España. Están compuestos de roca caliza, con un relieve agreste, producto de la erosión del agua y del hielo, siendo alguno de sus lugares más conocidos y famosos los “Lagos de Covadonga”, de origen glaciar, llamados así por su cercanía a la Basílica de Covadonga.

Dicen que el nombre de Picos de Europa, se debe a los marineros que cuando regresaban de sus incursiones marinas, lo primero que divisaban eras las imponentes cimas de las montañas que engalanan el parque. El Naranjo de Bulnes (conocido localmente Pico Urriellu), es tal vez, el pico más emblemático, ya que, su extraña forma y su altitud (2519 metros) atrae a los amantes de la escalada y la montaña.

Con sus escarpadas cimas grises peladas de vegetación, sus innumerables simas (más del 10% superan los 1000 metros de profundidad), sus majadas pintadas de verde, sus cuevas y sus impresionantes desfiladeros, como el del río Cares, originaron que, en 2002 fuera declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Cruzada por innumerables senderos, el parque ofrece un paisaje espectacular, dado que se pueden practicar deportes extremos como la escalada, el senderismo o degustar los famosos quesos de Cabrales y conocer Sotres, considerado el pueblo más alto de Asturias (a 1.050 metros de altura).